Hay muchas maneras de posicionarse en Internet, todas son interesantes si sabemos cómo utilizarlas. En este artículo hablaremos de dos técnicas: El posicionamiento orgánico y Google AdWords
Diferencias entre Posicionamiento SEO y Google Adwords
El posicionamiento orgánico en buscadores, conocido entre los usuarios como SEO o posicionamiento natural, es una técnica que permite conseguir que tu empresa, marca o servicio, aparezca de forma natural en los primeros lugares de la página de los buscadores cuando el usuario realiza una búsqueda determinada. Es decir, a través de palabras claves. Todo, sin que la marca referida tenga que pagar directamente a la plataforma por ello. Es decir, no es publicidad tal y como la entendemos.
Por su parte, el Google AdWords es una herramienta gestionada por la propia plataforma que sirve para insertar publicidad en la lista de resultados de búsqueda. Esta publicidad se ve en las primeras posiciones al realizar búsquedas en Google, con un formato diferenciador, normalmente sombreado y con amarillo de fondo, aunque su formato puede estar sujeto en las actualizaciones de los buscadores. También puede aparecer en el lateral derecho de la pantalla. Por si esto fuera poco, para diferenciarlo de las búsquedas orgánicas, ambas opciones vienen acompañadas de la palabra anuncio en su descripción.
Principal objetivo: atraer tráfico
El Posicionamiento Orgánico y AdWords comparten el objetivo final de atraer tráfico, en forma de visitas y usuarios, hacia la web de la empresa, pero la metodología utilizada no es la misma y la repercusión temporal, y la percepción que tienen de sus contenidos los usuarios, tampoco.
Gracias a la inversión económica que realizas en Google AdWords aseguras tu aparición en los primeros puestos de las búsquedas y consigues resultados tanto a corto, como a medio plazo. Es ideal para conseguir resultados inmediatos. Por ejemplo, para el lanzamiento de un producto o servicio de tu empresa, el posicionamiento orgánico es una opción cuyos resultados empiezan a ser visibles a partir del medio plazo, y llegarán a ser óptimos a largo plazo. Eso es así, ya que desde que empiezas a trabajar el SEO optimizando tu web y realizando acciones de SEO fuera de ella hasta que Google lo tenga en cuenta, todo ese trabajo, transcurre un largo periodo de tiempo.
¿Cuánto invertir?
Surge por supuesto la preocupación sobre cuánto debemos gastarnos. Lo cierto es que existen diferencias entre ambas opciones. Pese a que en las dos la inversión económica es necesaria, si se quiere obtener resultados. Lo cierto es que se realiza un mayor aporte de recursos en Google AdWords que en el posicionamiento orgánico. En Google AdWords hay que realizar un pago único cada vez que quieres aparecer en los resultados promocionados de una keyword. Esta inversión viene condicionada por el coste clic que tenga asignado.
El posicionamiento orgánico precisa también inversión. Sin embargo, es mucho más fácil de controlar por parte del cliente. La cuantía dependerá del coste del profesional SEO que tengas trabajando en el posicionamiento de tu web.
Otro aspecto diferenciador tiene que ver con la percepción del usuario. Nos referimos a la credibilidad que genera en el espectador dicha información. El posicionamiento orgánico ofrece contenidos relevantes, en formato de blog, artículos o vídeos que aportan valor. Tiene connotaciones positivas pues ofrece algo interesante y gratuito para el usuario. Por el contrario, los mensajes de Google Adword percuten directamente en el usuario, reclamándole una acción: “compra, visita, lee, conoce…”
Ambas técnicas son válidas para lograr los objetivos de incrementar el tráfico y las visitas en general a nuestros contenidos. Pero recomendamos combinar ambas herramientas para lograr una optimización de tus campañas.